lunes, 30 de marzo de 2020

CARACTERISTICAS DE LA SANTIDAD DE OSCAR ARNULFO ROMERO


Cuando se trata de beatificar o de canonizar a un hombre, es aquí donde se le examina: su amor.
El amor es la santidad y la medida de la santidad.
Si un hombre sabe desprenderse de sí mismo y amar, es santo;
si un hombre habla mucho de santidad pero no sabe amar, no es santo
Mons. Romero (13 mayo 1979)



Como decíamos antes, para el pueblo sencillo y pobre, para las organizaciones cristianas y para gran parte de la población, Mons. Romero ha sido siempre un santo, ¿qué tipo de santidad descubrimos en él?:

Sin duda las CARACTERISTICAS TRADICIONALES de santidad: 

-    INTEGRIDAD y COHERENCIA DE VIDA, la cual está fuera de toda discusión, si hubiera tenido alguna falla personal sus enemigos no hubieran tardado en sacarla a luz para denigrarlo, pero, nunca lo hicieron porque nunca le encontraron nada. Por otra parte, a la base de su vida, cristiana y sacerdotal estaba, ante todo, una personalidad humilde, sencilla y madura, porque como él mismo dijo “antes de ser un cristiano tenemos que ser muy humanos” (3 diciembre 1978)
-    HOMBRE DE ORACION: quienes estuvieron cerca de él testimonian la constancia y la intensidad de su oración; él mismo lo testimonia en sus homilías, era uno de sus temas preferidos: quiero recomendar la necesidad de encontrar ese único necesario, la necesidad de orar” (Homilía de 17 julio 1977). Pero, la de Mons. Romero no es una oración alienante: “La Religión no consiste en mucho rezar, la Religión consiste en esa garantía de tener a mi Dios cerca de mí; porque le hago el bien a mis hermanos. La garantía de mi oración, no es el mucho decir palabras, la garantía de mi plegaria está muy fácil de conocer: ¿cómo me porto con el pobre?, porque allí está Dios (5 Febrero 1978).
-    DEVOTO DE LA SANTISIMA VIRGEN. Mons. Romero nació el 15 de agosto, conmemoración de la Asunción de María, podemos decir que desde allí llevaba la impronta mariana en su espíritu. Pero, también, lo hacía con madurez: “María, tanto para ustedes pueblo de Dios, es una laica; María no es sacerdote ni religiosa; María es una esposa, María es una madre de familia, María es una mujer seglar. Allí estuviera sentada en las bancas de la Catedral como una de estas mujeres que me escuchan y yo no la distinguiría. Pero su corazón lleno de este carisma profético absorbía las palabras del gran profeta, Jesucristo su hijo” (15 junio 1979). Su teología mariana es una visión historizada de María: María se hace salvadoreña y encarna a Cristo en la historia de El Salvador, y María se hace del apellido de ustedes y de mi apellido para encarnar la historia de su familia, de mi familia en la vida eterna del Evangelio. María se identifica en la vida eterna del Evangelio. María se identifica con cada uno de nosotros para encarnar a Cristo en nuestra propia vida individual. Dichosos si de veras en eso hacemos consistir la devoción a la Virgen. Por eso el Concilio avisó a los predicadores que se cuidaran mucho de fomentar la falsa idea de la devoción a la Virgen que lamentablemente nos ha separado de los protestantes, porque algunos católicos han llegado a hacer de la Virgen una idolatría, una mariolatría. Pero la verdadera doctrina es que María no es un ídolo. El único salvador es Dios Jesucristo, pero María es el instrumento humano, la Hija de Adán, la Hija de Israel, encarnación de un pueblo, hermana de nuestra raza, pero que por su santidad fue capaz de encarnar en la historia la vida divina de Dios. Entonces, el verdadero homenaje que un cristiano puede tributar a la Virgen es hacer como Ella el esfuerzo de encarnar la vida de Dios en las vicisitudes de nuestra historia transitoria (24 diciembre 1978).

-    FIEL A LA IGLESIA, AL PAPADO Y AL MAGISTERIO. De formación tradicional, estos eran puntos fuertes en la personalidad de Mons. Romero y, por eso, su lema al asumir el Arzobispado fue: “Sentir con la Iglesia” y, en los últimos años, a pesar de las dificultades que tuvo con otros obispos, de la incomprensión del Papa y de la Curia Vaticana, se mantuvo fiel a sus principios de obediencia absoluta a la institución: Hermanos, la gloria más grande de un pastor es vivir en comunión con el Papa. Para mí, es el secreto de la verdad y de la eficacia de mi predicación estar en comunión con el Papa. Y cuando encuentro en su magisterio pensamientos y gestos parecidos a los que necesita nuestra Iglesia, me lleno de alegría” (2 marzo 1980). Le doy gracias a Dios que toda mi vida sacerdotal la ha querido caracterizar por una solidaridad y fidelidad al Santo Padre, al representante de Cristo. Mis ojos están fijos en él, jamás pienso en traicionarlo” (25 marzo 1979).
-    POBREZA Y AUSTERIDAD EN SU VIDA: al inicio de su episcopado algunas familias pudientes quisieron regalarle una vivienda en un barrio de clase alta, sin embargo, él rechazó aquella propuesta y se fue a vivir a la sacristía del Hospital para cancerosos la Divina Providencia, sus razones las fue exponiendo en las homilías: Cristo es la riqueza absoluta del hombre. Por ganar a Cristo hay que perderlo todo” (18 noviembre 1977), “Gracias a Dios, no adoramos la riqueza ni nos hace falta; cuando lo tenemos todo en el único Dios que ha creado las cosas de la tierra, nos sentimos infinitamente más desarrollados y ricos que los que creen consistir las riquezas en el oro y en las cosas de la tierra” (4 septiembre 1979),La pobreza evangélica une la actitud de la apertura confiada en Dios con una vida sencilla, sobria y austera que aparta la tentación de la codicia y el orgullo” (Puebla 1149. 11 noviembre 1979).
Fuente: SICSAL 2015

No hay comentarios: