martes, 26 de septiembre de 2023

IMPORTANCIA DE LOS ACUERDOS EN LA CONSULTORIA DE PAZ

En el Curso Consultores para la Paz (Septiembre, 2023) se genero un espacio para conversar sobre un tema afines a los contenidos del curso. Algunos de los aportes màs significativos fueron:

“Desde mi experiencia y basándome en el material de lectura suministrado, considero que establecer acuerdos claros antes de iniciar un proceso de consultoría es esencial. Estos acuerdos nos permiten generar confianza y comprensión mutua, tanto del consultor como del cliente, lo cual garantiza una colaboración efectiva y una definición clara de las expectativas. Además, al establecer acuerdos, disminuimos las posibilidades de conflictos o malentendidos que puedan impedir la toma de decisiones adecuadas. De ahí la importancia de una comunicación efectiva en el proceso de consultoría ya que implica la dimensión técnica y humana en la relación consultor/a y cliente” señala Adrián Torres Marcano, uno de los participantes.

Mientras que Ana Marcano, señala que “la importancia de establecer acuerdos claros antes de iniciar un proceso de consultoría es establecer un acuerdo,  debemos conocer los componentes humanos que pueden influir en la relación consultor-cliente. La claridad en el inicio se necesita para apoyar el proceso de consultoría y nos permitirá diseñar las acciones a seguir. Recordar que una meta sin un plan, es solo un deseo".

Importante, el detalle de darse la oportunidad para conocer al cliente, ya que una buena relación va a facilitar la comprensión de lo que éste espera y el necesario entendimiento para dar las respuestas que espera obtener.

Javier Spacca aporta una interesante pregunta ¿Por qué y para qué es importante tener claridad en lo que vamos a ofrecer y lo que el cliente espera de nosotros?

Ademàs, complementa señalando que “la pre consultoría como fase inicial del proceso mismo de consultoría es muy importante ya que es el momento donde Cliente y Consultor(a) se conocen, el primero plantea sus inquietudes y expectativas, el segundo su experiencia profesional, experiencia previa en el área de consultoría y sus condiciones de trabajo. La sinceridad, dominio del área o temas sobre los que verdad la consultoría y la claridad en los planteamientos que realice el consultor(a) en esta fase o etapa son fundamentales para garantizar el éxito de la Consultoría. Los acuerdos precios entre cliente y consultor(a) aminoran la posibilidad de que se produzcan controversias o dificultades durante el proceso de Consultoría, ya que ambas partes tienen el conocimiento exacto de que quiere y que puede esperar de la otra parte, es fundamental que todos estos acuerdos que se definen al inicio queden plasmados en el Contrato o acuerdo de servicios de consultoría a realizar”

Por otro lado, el participante Aleris Alfonzo señaló en el conversatorio “es de gran importancia tener claro lo que vamos a ofrecer, para generar confianza en el cliente, para que se sienta que se pueden encontrar varias vías de solución y enfocar la más pertinente ante la situación planteada. Es muy importante una escucha atenta, ajustar los comentarios a la complejidad de la situación, presentar términos claros, siempre con empatía para generar la confianza en el plan que se debe poner en el proceso”.

La escucha activa es primordial, como muchos autores lo indican, escuchar con todos los sentidos así como plantear las interrogantes adecuadas para profundizar nuestra comprensión y validar lo que nuestro interlocutor (cliente) espera de la consultoría.

Nuevamente, Torres señala que “la comunicación efectiva y asertiva desempeña un papel fundamental en el proceso de consultoría. A través de una comunicación clara y abierta, se puede lograr una colaboración exitosa entre consultor/a y cliente, permitiendo el intercambio de información relevante, que en ocasiones no sucede. La comunicación cómo aspecto transversal también resulta esencial para evaluar y mejorar el proceso de consultoría en general”

En este punto, se resalta que la Comunicación es el principio, el medio y el fin de la consultoría.

En mi opinión es importante establecer los acuerdos claros antes de iniciar el proceso de consultoría con los siguientes puntos señala Verity González:

1.-Se verifican las expectativas y necesidades del cliente.

2.-Se establece una planificación y los resultados esperados.

3.-Se puede hacer un seguimiento de acciones o ajuste de los acuerdos, responsables, recursos necesarios y actores clave. 

4.-Definir los canales de comunicación y quiénes serán los interlocutores.

5.-Permite establecer indicadores para mostrar resultados.

Para culminar, el conversatorio Irene Monsalve indica que “es importante establecer acuerdos que permitan estar claros en los planteamientos que se presenten. Esto permite desarrollar un una relación de confianza y total claridad en el proceso que se va a realizar. Se debe partir de que se quiere, cual es el objetivo, para así establecer las estrategias para lograrlo.

De esta forma, los y las participantes pudieron reconstruir sus aprendizajes desde sus vivencias y experiencias de vida en torno al tema del Curso Consultores para la Paz en un ameno conversatorio como parte del proceso de aprendizaje emprendido desde la Cátedra de la Paz y Derechos Humanos Mons. Oscar Arnulfo Romero bajo la facilitación de la Msc. Nathalie Carrillo Gòmez, coordinadora académica del curso.

Mayor información: rinconparalapaz@gmail.com



 

 

domingo, 24 de septiembre de 2023

COMPRENDER LA PAZ.

 

Un día observando a mi sobrina bailando, pensé los lugares de baile siempre están rodeados de espejos. Con ellos, los bailarines pueden verse a sí mismo en sus movimientos y con ayuda de sus instructores pueden corregir sus pasos buscando mejorar su técnica.

Esta cotidianidad, como en muchos ámbitos, nos lleva a tener la reflexión de los que vemos y pensamos, aspecto fundamental dentro del aprendizaje.

Sin embargo, dentro de los contextos educativos sean formales o informales no existe un espejo que nos ayude a vernos a nosotros mismos, pero si existe un medio para conocer nuestros procesos cognitivos y actitudinales que nos permite trabajar en ellos.

La metacognición es la capacidad de las personas de reconocer la manera en la que piensa, y de esta forma pueda planificar, monitorear y evaluar su proceso de pensamiento.

Esta habilidad permite a las personas comprender los objetivos de su aprendizaje y cómo lograrlo mediante  estrategias, así como reflexionar sobre sus fortalezas y debilidades con respecto a los resultados obtenidos.

Tanto los bailarines que tienen los espejos para verse, las personas pueden mejorar su comprensión de la realidad para recibir nuevos conocimientos y comprender cómo recuerdan y procesan nueva información.

Para la educación para la paz, el paradigma Informar, Formar y Transformar implica un aprendizaje a los largo de la vida, que propicia a las personas la motivación de continuar aprendiendo, facilitando y reaprendiendo en nuevas situaciones de aprendizajes.

El paradigma de la Educación para la Paz como un proceso integral y multidimensional que consiste en:

1.-Informar, a través de los principios de la Pedagogía de la Paz y Educación en Derechos Humanos, donde el conocimiento previo de los y las participantes, es el punto de partida de los procesos formativos.

2.-Formar, en base al enfoque socio - afectivo y los aportes de la Educación Popular, que facilitan la comprensión y desarrollo del pensamiento en el marco de los principios de la Carta de las Naciones Unidas.

3.-Transformar, bajo la premisa de que toda acción desde la Cultura de Paz debe cambiar el entorno y cada persona que interactué con Cátedra de la Paz, en última instancia, debe ser un agente transformador con valores democráticos y autodefinirse como Constructor/a de Paz.

Por otra parte, la metacognición motiva a las personas ya que les permite tener el control de su propio aprendizaje. Al ser capaces de estudiar de manera autorregulada y reconocer cómo piensan, saben cuándo y cómo utilizar la estrategia que más les convenga para lograr sus objetivos de aprendizaje eficazmente.

La creatividad, el análisis analítico y la comunicación efectiva son algunas de las habilidades que se desarrollan al estar familiarizados con su proceso de pensamiento. Mientras que la metacognición abarca una gran parte del aprendizaje en general, al momento de estudiar algo nuevo se puede aplicar el siguiente proceso para acostumbrarse a practicar esta habilidad.

El proceso de metacognición relacionado a la comprensión de la paz lo podemos aplicar en el siguiente ejemplo: Frank tiene un dilema con hacer la paz o no. Para él es difícil identificar las situaciones y los lugares donde ciertos acontecimientos de la vida diaria se llevan a cabo, por lo que él sabe que hay momentos que son adversos a la paz como el discutir con el chófer del transporte público.

Frank decide reunirse con un grupo de amigos una semana antes para conversar sobre la paz, de los eventos  que promueven o no la paz; que si la paz es la ausencia de guerra o es màs que esa definición.

Decide apoyarse en un pizarrón para realizar una línea del tiempo y así acomodar las momentos de su cotidianidad para visualizarlas fácilmente y compartir conceptos clave sobre la paz, esto con la finalidad de recordarlas con más facilidad.

Al llegar el día siguiente, Frank pudo recordar y relacionar los eventos sobre la paz con los comentarios de sus compañeros, así como la línea del tiempo que hizo en conjunto con ellos; por lo que se sintió seguro al momento de expresar qué es la paz. Finalmente, Frank comprendió que la paz se debe entender desde lo que piensa y vive con relación a los otros.

Siendo una habilidad trascendental en la vida de las personas, la metacognición suele ser infravalorada en todas las etapas educativas.

Por consiguiente, es importante que los docentes y/o facilitadores sean capacitados en esta habilidad, pero no solo para que sea transmitido a sus participantes, sino también para que aprendan sobre sus propias acciones pedagógicas, con la finalidad de anticipar y evaluar; mejorando el modo  de compartir sus conocimientos a un determinado salón de clases.

Del mismo modo, recomendamos algunas actividades que pueden implementarse dentro del proceso de educación para la paz en desarrollar esta importante herramienta:

·         Informar: Una buena práctica es informar al participante lo que se espera de ellos, los temas que se abordarán y el objetivo y competencias a desarrollar en cada sesión de trabajo.

·         Cuestionar: Al hacer las preguntas sobre el tema y que un participante conteste, es muy útil preguntar el porqué de su respuesta. De esta forma, tanto el facilitador como el grupo podrán visualizar el proceso de pensamiento del participante, lo cual podrá traer a la luz una discusión sobre las diferentes estrategias para llegar al mismo resultado. Es así como los participantes podrán conocer las diferentes formas de pensar diferentes a las de ellos, y tal vez adoptar algún método distinto a lo que está acostumbrado. La técnica de repreguntar es válida en este aspecto.

·         Empezar una bitácora: Tomando en cuenta la introversión de algunos participantes, este es una buena opción para impulsar la práctica de la metacognición. Es recomendable en procesos formativos largos. Después de culminar el tema tratado, pedirles que escriban lo que aprendieron o cómo lo aprendieron en un minuto. Si tienes más tiempo o deseas que esta sea una práctica regular, empezar la bitácora con estas (o más) preguntas al terminar cada tema también es buena idea.

·         Retroalimentación entre compañeros: Para conocer más de cerca los procesos de pensamiento entre participantes se pueden hacer grupos pequeños para revisar actividades y discutir sobre las estrategias de pensamiento que tomó cada participante para llegar a su objetivo.

·         Autocorrección: Los errores son los mejores maestros, aprendes más de ellos a que no cometieras ninguno. La técnica consiste en que, al entregar los resultados de una evaluación o test, el facilitador disponga de las respuestas correctas para que los participantes las conozcan en el momento y reflexionen acerca de lo que contestaron y lo que es correcto; y así, corregir sus errores ellos mismos.

Las personas que utilizan sus habilidades metacognitivas son más propensas a tener un aprendizaje activo, ya que saben cuando algo no les hace sentido y hacen lo posible para resolver sus dudas, en vez de continuar con sus estudios pasivamente.

Es gracias a esto que se desarrollan “habilidades blandas” o “habilidades poderosas” importantes para trabajar en equipo, tales como la colaboración y la resolución de conflictos.

Las Estrategias pedagógicas, fundamentadas en el modelo de la investigación-acción que privilegia la reflexión sistemática de los participantes en torno a los conceptos, enfoques, métodos e instrumentos impartidos por el facilitador promoviendo así la recodificación constructiva de los contenidos para luego adaptarlos a las particularidades de sus propios contextos sociales, culturales e institucionales. Estas son fundamentadas en los principios de la Educación para la Paz y de la Educación Popular.

La metacognición incentiva el entendimiento de nosotros mismos a través de la reflexión, conociendo nuestras propias fortalezas y debilidades, además de evaluar nuestras acciones para corregirlas y mejorar nuestros procesos.

El conocimiento de uno mismo es la clave para tener un aprendizaje más efectivo y duradero, ¡no dudes en tomar unos minutos para reflexionar sobre ti mismo y conocerte cada vez más!

Fuente: 

Articulo referencial  https://www.significados.com/metacognicion/

Cátedra de la Paz (2013) Definición Diplomado Nacional en Cultura de Paz. Mérida, Venezuela. Passim.





viernes, 1 de septiembre de 2023

ESPACIOS DE DIALOGOS Y CULTURA DE PAZ

 

Cátedra Cultura de Paz y Derechos Humanos “Mons. Oscar Arnulfo Romero, adscrita a la Dirección General de Cultura de La Universidad de Los Andes (Mérida, Venezuela) dedicada a generar propuestas para la promoción, formación y protección de la Cultura de Paz y Derechos Humanos de la Infancia y Adolescencia, mediante el trabajo con familias, instituciones, escuelas u otros actores sociales con criterios de Desarrollo Local Sustentable desde el Estado Mérida (Venezuela)

Uno de los principios de Cultura de Paz (Manifiesto ONU 2000) nos dice “Escuchar para comprender” que implícitamente alude a  la Escucha Activa; como parte de los mecanismos de resolución pacífica de conflictos.

De allí, que venimos promoviendo la construcción de espacios de diálogos desde una línea de acción que la llamamos “diálogo y cultura de Paz”

Por los años, 2005 a 2010 posterior al paro petrolero, promovimos la campaña CONVIVE en el estado Mérida, iniciativa nacional que buscaba en ese tiempo, de que todos podíamos convivir en paz en Venezuela.

En el 2010, promovimos en el Municipio Sucre, la AGENDA JUVENIL POR LA PAZ Y LA VIDA, donde jóvenes aprendieron a resolver sus diferencias dialogando también definiendo un agenda de acción, que logro ser presentada en la Cámara Municipal de dicho municipio por los propios jóvenes.

Con la Red de Acción Social de la Iglesia, en su campaña “Hablando se entiende la Gente” promovimos en Mérida acciones en las comunidades con sus actores sociales para potenciar el diálogo y comunicación frente a situaciones de conflictos promoviendo talleres sobre resolución pacífica de conflictos, comunicación no violenta, dialogando se entiende la gente, entre otros en los municipios Libertador, Campo Elìas, Santo Marquina, Sucre.

 

Del 2014 al 2016, promovimos con la Embajada Británica, la formación de funcionarios municipales en Cultura de Paz en los municipios Libertador, Campo Elìas, Santo Marquina, Sucre; municipios de ambos sectores políticos. Logramos una ordenanza municipal en el Municipio Campo Elías y dos planes municipales de Cultura de Paz; donde se hacía énfasis en fortalecer el dialogo para alcanzar la paz.

En 2020-2021 (en pandemia) realizamos el proyecto DIALOGO Y CULTURA DE PAZ en los estados Mérida, Barinas, Portuguesa y Anzoátegui con el apoyo de una Fundaciòn Nipona para la Paz con la finalidad de promover el dialogo como herramienta de Cultura de Paz en comunidades populares de dichos estado a través de la formación de activistas por la paz. De allí, surge RENUPAZ (Red de Nuevos Activistas por la Paz)

Este año, en las escuelas y facultades de la Universidad de Los Andes estamos promoviendo desde la formación en el manejo del conflicto y la comunicación no violenta, crear espacios para el diálogo y cultura de paz en los espacios universitarios.

De esta manera, seguimos promoviendo la Cultura de Paz en las personas que desean ser Constructores de Paz haciendo énfasis en el Diálogo y Cultura de Paz.

Mayor información: catedradelapazula@gmail.com

 


 

sábado, 27 de mayo de 2023

NOS RETOCAMOS POR LA PAZ

 

La Paz es un proceso dinámico, multidimensional, fluido, de construcción colectiva; por eso, nos retocamos un poco en nuestra identidad a partir de la fecha para integrar, complementar y profundizar màs nuestra labor en la Construcción de Paz.

A partir de la presente fecha, hemos sido notificado por la Dirección General de Cultura de la Universidad de Los Andes, que damos un leve toque a nuestro nombre para empezar a llamarnos….

Cátedra Cultura de Paz y Derechos Humanos “Monseñor Oscar Arnulfo Romero”, de la Dirección General de Cultura de la Universidad de Los Andes dedicada a generar acciones de promoción, formación y protección de los Derechos Humanos y Cultura de Paz de la Infancia, Adolescencia y Juventud con enfoque de Desarrollo Local Sustentable e Interculturalidad con trabajo con los actores sociales (familia, escuelas y comunidad) desde el Estado Mérida / Venezuela.

Creada el 17 de octubre de 1987 por aprobación del Consejo Universitario, estos años hemos acumulado la experiencia desarrollando actividades de formación y capacitación en temas de Cultura de Paz y Derechos Humanos, lo cual incluye acompañamiento en las instituciones educativas y públicas en general, sumado al apoyo a las demás organizaciones de la sociedad civil en Venezuela. Siendo sus programas: Cultura de Paz y Derechos Humanos; Niñas, niños, adolescentes y jóvenes para la paz; Constructores de Paz; Voluntariado de Paz; y, Presencia e Incidencia Pública. También, por nuestro trabajo socio-comunitario nos identificamos como una Organización Comunitaria de Desarrollo Social.

Partimos de la definición de Cultura de Paz que establece la Organización de las Naciones Unidas (1999), que reza[1]:

“conjunto de valores, actitudes, comportamientos, tradiciones, estilos de vidas basados en el respeto a la vida, el fin de la violencia y la promoción y la práctica de la no violencia por medio de la Educación, el diálogo y la cooperación; el respeto pleno y la promoción de los Derechos Humanos y las Libertades fundamentales; el compromiso de la resolución pacífica de los conflictos; los esfuerzos para satisfacer las necesidades del desarrollo y protección del ambiente de las generaciones presentes y futuras; el respeto y la promoción del derecho al desarrollo; el respeto y el fomento de las igualdades de derechos y oportunidades de las mujeres y de los hombres; el respeto y fomento del derecho de todas las personas a la libertad de expresión, opinión e información; toda la promoción de los valores que permitan que la sociedad en el contexto nacional e internacional favorezca la paz”[2].

Bajo esta premisa, en Cátedra de la Paz entendemos como Cultura de Paz: la posibilidad de todas las personas de recibir educación sistemática, amplia y de calidad, que les permita: comprender sus derechos y responsabilidades; respetar y proteger los Derechos Humanos de otras personas; entender la interrelación entre los Derechos Humanos, la Democracia Participativa y Protagónica de todos y todas; ejercitar en su interacción diaria valores, actitudes y conductas consecuentes a los Derechos Humanos.

Siendo esta Cultura de Paz [es] un componente del Derecho a la Educación, como condición necesaria para el ejercicio de todos los Derechos Humanos, la Paz y la Democracia en los ciudadanos y ciudadanas” (Cátedra de la Paz, 2011[3]). Nuestras acciones educativas están enmarcadas en el paradigma de la Educación para la Paz, como un proceso integral y multidimensional que consiste en:

ÿ  Informar, a través de los principios de la Pedagogía de la Paz y Educación en Derechos Humanos, donde el conocimiento previo de los y las participantes, es el punto de partida de los procesos formativos.

ÿ  Formar, en base al enfoque socio - afectivo y los aportes de la Educación Popular, que facilitan la comprensión y desarrollo del pensamiento en el marco de los principios de la Carta de las Naciones Unidas.

ÿ  Transformar, bajo la premisa de que toda acción desde la Cultura de Paz debe cambiar el entorno y cada persona que interactué con Cátedra de la Paz, en última instancia, debe ser un agente transformador con valores democráticos y autodefinirse como Constructor/a de Paz.

De allí que la metodología educativa empleada corresponde a la modalidad “Taller” ya que éste constituye un espacio de reflexión, creación y construcción del conocimiento que reafirma el consagrado concepto pedagógico del “aprender haciendo”, mediante el cual la importancia de la acción se evidencia en el desarrollo del proceso enseñanza-aprendizaje[4].

Nuestras estrategias pedagógicas, fundamentadas en el modelo de la investigación-acción que privilegia la reflexión sistemática de los participantes en torno a los conceptos, enfoques, métodos e instrumentos impartidos por el facilitador promoviendo así la recodificación constructiva de los contenidos para luego adaptarlos a las particularidades de sus propios contextos sociales, culturales e institucionales. Fundamentados en los principios de la Educación para la Paz y de la Educación Popular. Contamos con un Marco Pedagógico de Paz (MPP) que rige toda nuestra acción socio-educativa formal y no formal, presencial y virtual.

Esto, tanto para las formaciones cortas (cursos) como largas como el Diplomado Nacional en Cultura de Paz que representa la máxima categoría y cuenta con el aval de la Universidad de Los Andes (Mérida-Venezuela) en calidad de estudios de cuarto nivel no conducentes a grado.

Por estas razones, nos comenzaremos a denominar Cátedra Cultura de Paz y Derechos Humanos Mons. Oscar Arnulfo Romero, conservando toda nuestra historia, experticia e identidad que se nos conocido a nivel regional, nacional e internacional.

Mayor información: catedradelapazula@gmail.com



 



[1]Organización de las Naciones Unidas (1999) Declaración y Programa de Acción sobre una Cultura de Paz. [Documento en línea] Disponible: http://www3.unesco.org/iycp/kits/sp_res243.pdf [Consultado 2012, marzo, 19].

[2]Resaltado propio.

[3]Cátedra de la Paz y Derechos Humanos “Monseñor Oscar Arnulfo Romero” (2011) IV Plan Estratégico 2011 – 2013. Mimeo: Mérida – Venezuela.

[4]Cátedra de la Paz y Derechos Humanos “Monseñor Oscar Arnulfo Romero” (2014) Diplomado Nacional en Cultura de Paz: Documento Rector. Mimeo: Mérida – Venezuela.

domingo, 26 de marzo de 2023

SABES QUE ES EL CONFLICTO CONDOMINIAL?

La ponencia con mayor aceptación en el Encuentro de Condominios en Los Andes realizado este sábado #24marzo en #Mérida #Venezuela

El conflicto condominial fue tratado por la Msc. NATHALIE CARRILLO GÓMEZ, Coordinadora Académica de la Cátedra de la Paz de la ULA. 

La vida es un eterno conflicto” (Anónimo).

El conflicto es un hecho inherente a la condición humana, pretender vivir sin conflictos supone estar aislado totalmente de personas y ni aun así se podría escapar de ellos. El reto está en la percepción que sobre el conflicto tengamos, lo cual va determinar la forma en que lo vamos a abordar.

En este sentido, la convivencia está marcada justamente por tal percepción y manejo de las diferencias que en repetidas ocasiones lejos de separarnos, nos unen aunque las emociones no nos permitan verlo.

Los condominios, pueden llegar a ser una muestra micro de lo que sucede en una localidad, parroquia, estado y/o país. Las variables que influyen en la aparición de los conflictos, las reacciones y formas de manejarlo surgen de la inobservancia de las normas así como de la escasa disposición a cumplirlas sea por desconfianza, desconocimiento o impunidad ante contravenciones de terceros.

Aunado a ello, el manejo inadecuado de situaciones por parte de los responsables indicados para llevar a buen término las situaciones presentadas. En ocasiones por inexperiencia, otras por actitudes indiscretas e incluso autoritarismo.

Este panorama demuestra la necesidad de fortalecer las capacidades y competencias de los integrantes de las Juntas de Condominio (sin menoscabo de los vecinos en general) a fin del desarrollo de habilidades que les faciliten abordar los conflictos de manera adecuada. Conforme las situaciones que se presenten, las Juntas de Condominio pueden aplicar mecanismos alternativos como el Arbitraje, la Mediación e incluso la Conciliación en casos específicos siempre en negociación. 

La ponente quiere generar reflexión para promover una visión transformadora del conflicto y acercamiento a los mecanismos alternativos de solución pacífica.

Carrillo es Criminólogo, magister en Ciencias políticas, con numerosos estudios en resolución de conflictos.

Mayor información: catedradelapazula@gmail.com

 


sábado, 11 de febrero de 2023

LA DIÁSPORA: LO QUE SE VAN, LOS QUE SE QUEDAN.

 

Comenzaré por mi opción de vida, como Educador para la Paz y Derechos Humanos, diciéndoles que todo aquello generado por el Estado, que vaya en contra de la dignidad humana es una violación de Derechos Humanos. La Paz y Los Derechos Humanos van de la mano. En eso no hay discusión…

Lo fascinante de las fronteras es que nos permiten ser creativos a la hora de plasmar sus realidades. Quien vive y entiende las fronteras lucha siempre por conservar su posición de observador respecto a todo cuando allí acontezca en las diversas disciplinas; como es este caso, de estos escritores ganadores del concurso “La diáspora: los que se van, los que se quedan” nos abren una nueva ventana para repensar nuestras miradas del tema.

Desde este lugar fronterizo como es Mérida, con su Universidad de Los Andes y su ciudad en permanente simbiosis, con vocación para entender las miradas múltiples y multidimensionales del tema que genera las diversas situaciones humanas, sociales y políticas en los territorios de fronteras.

Uno de esas miradas, es la diáspora para algunos; mientras para otros, es la migración forzada. Ambas sinónimos si lo vemos, o antónimos si lo queremos. Es cuestión de estilo y semántica.  Lo que sí sabemos que es producto de la Emergencia Humanitaria Compleja que vive Venezuela desde los últimos años.

Una característica de la Emergencia Humanitaria Compleja, que se agudizó con la llegada de la Pandemia del COVID19 es la permanente violación de los Derechos Humanos y la creciente movilización de los venezolanos a otras realidades.

Esta movilización nos produce cada reacción, cada palabra, cada pensamiento, cada posición, cada juicio, cada mirada del otro que trata de redefinirse en un vacío jurídico, humano y existencial al intentar darle cuerpo al sentimiento de ser migrante en otro país.  Esta redefinición de los que se van y de los que se quedan sin duda nos ha marcado como Nación.

En este punto, permítame recordar a mi querido profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Los Andes, el profesor Enrique Neira que siempre nos decía “que la nación es el conjunto de individuos unidos por vínculos geográficos, históricos y culturales, pero que además se refiere a la capacidad política del Estado de darnos la felicidad; al menos intentar hacerlo con éxito”.

Si vemos esta situación de la diáspora venezolana, cuando las organizaciones internacionales de las Naciones Unidas, señalaron el año pasado (2022) que se han ido de Venezuela más de siete millones cien mil personas; creo que esa mirada que nos decía mi profesor Enrique Neira de que el Estado debía intentar con éxito darnos la felicidad como Nación ha fracasado y demostrado su incapacidad política.

Según ACNUR reconoce “más de 7 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela, la mayoría de las cuales vive en países de América Latina y el Caribe, esta se ha convertido en una de las crisis de desplazamiento de mayor magnitud en el mundo”.[1]

Recuerden que les comente los términos “diáspora” y “migración forzada” en miradas distintas; ahora bien, no nos podemos ir sin saber un poco de ellas, en sus mínimas diferencias para entender bien el tema que hoy nos trae acá a estos bellos espacios del Centro Venezolana Americano de Mérida (CEVAM)

Si hablamos de Diáspora se refiere a la dispersión por el mundo de grupos humanos que se han visto obligados, por distintas causas, a abandonar su lugar de origen.

Mientras que si hablamos de Migración Forzada según la Organización Internacional de Migraciones (OIM), la migración forzosa es “un movimiento migratorio que, aunque puede ser impulsado por diferentes factores, involucra el uso de la fuerza, la compulsión o la coerción”

El artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos establece, que toda persona tiene derecho a circular libremente y, a elegir su residencia, en el territorio del Estado de su preferencia; de forma libre sin coerción ni obligado por parte del Estado u otro factor.

En esta parte de mi intervención, resalto que todos hemos sido afectado por este fenómeno migratorio; posiblemente, toda familia venezolana en la actualidad tiene un familiar que migró en estos últimos diez años. Tenemos  Abuelitas Lindas que se quedaron sin sus hijos e hijas, tíos que nos quedaremos sin ver a nuestros sobrinos en sus mejores años de vida; niños, niñas, adolescentes que están desorientados por la ausencia de sus padres pero lo más significativo, que tenemos una nación con el veinte cinco por ciento de su población construyendo realidades en otras naciones.

Debemos pasar de la realidad cruel e inhumana de la diáspora a la construcción de una ciudadanía de frontera que permita darle el valor a quienes se han ido; iniciativa como este concurso contribuye con esta experiencia de creación de estas obras ganadoras a darle una mirada distinta a la diáspora.

Puedo decirles en mi experiencia desde el 2012 con la Escuela de Paz y Convivencia Ciudadana, Programa de Paz del CINEP (Centro de Investigaciones de Educación Popular) con sede en Bogotá, Colombia en las diversas formaciones e investigaciones sociales de la mano de la Universidad Javeriana de Bogotá para consolidar una ciudadanía de frontera con los ciudadanos venezolanos que han migrado a Colombia, y quienes permanecen en la frontera Colombo-Venezolana.

Podemos señalar que una ciudadanía de frontera, debe estar orientada a promover el sentido de lo humano, consolidar la espiritualidad de la solidaridad, recuperación de la dignidad y formación de sujeto activo en derechos humanos, con una responsabilidad ciudadana, en una aplicación de diversos enfoques principalmente, basados en los Derechos Humanos y del Derecho Internacional de los Derechos Humanos, haciendo énfasis diferencial de género, entre otros aspectos de toda acción que intente revertir los efectos en quienes se han ido y se han quedado.

En el año 2005, la Revista Actual en su número 59/60 de la Dirección General de Cultura y Extensión (llamada así para esa fecha) titulaba su edición como FRONTERAS BORRASCOSAS. En esa edición ya se visualizaba en sus maravillosos escritos, la realidad de la diáspora venezolana.

Nos decía en esta bella obra, que “lo borrascoso de las fronteras es más labor de los hombres que de la historia, la cultura o de las instituciones. La escena fronteriza se nos presentan en dicha obra a partir de la diferencia, de la suma y de la identidad; acentuando las semejanzas y diluyendo las diferencias”[2] son notorias.

Se trata con estas obras ganadoras de este concurso, verlas en este escenario de lo que nos quedamos y de los que se fueron, de redibujar esa realidad en la creatividad literaria de cada uno de los autores, llena de excelencia, algunos extrañados  que de este tema de la diáspora se puedan crear algo maravilloso pero ajenos para muchos; pero a la vez, tan familiar para otros, se trata de darle rostro literario al imaginario colectivo de la diáspora.

En eso consiste su realismo y pertinencia socio-cultural de estas obras ganadoras. El fondo, es compartir una mirada de la historia reciente de Venezuela, que sin duda, no es la mejor cara que contarán nuestra historia en el futuro.

En estas obras, los procesos culturales y políticos implícitos son la forma y motivación. Su ambientación creativa y única consiste en ponernos hablar de las mismas, de forma directa y sin tapujos.

Son narrativas, en fin, buscan recrear una realidad impregnada de múltiples violaciones a la dignidad humana, a los Derechos Humanos y a la Paz; que muestran entre líneas los puntos fuertes de las debilidades de quienes tuvieron la responsabilidad de evitar esta situación.

Para culminar, debemos ponernos al frente al espejo llamado Venezuela, para resaltar que lo más importante de quienes se han ido y quienes nos hemos quedado, es recuperar la dignidad humana, que es la base de los Derechos Humanos junto a la recuperación integra de la Democracia, que es el único sistema político que puede a pesar de ser imperfecto, garantizar los Derechos Humanos, la Paz y la Dignidad Humana.

Muchas gracias.

Nota: Lo anterior fue expuesto por el politólogo Walter Trejo Urquiola, Coordinador General Cátedra de la Paz y Derechos Humanos Mons. Oscar A. Romero, adscrita a la Dirección General de Cultura en la Universidad de Los Andes en el acto de presentación de los ganadores del concurso La Diáspora: lo que nos quedamos y los que se fueron organizada por el Centro Venezolano Americano de Mérida (CEVAM) con la Dirección de Cultura de la Universidad de Los Andes.

 


 

 



[1] Mayor información: https://www.acnur.org

 

[2] Presentación Revista Actual (2005) FRONTERAS BORRASCOSAS. Ediciones Revista Actual Nro 59/60 Dirección General de Cultura y Extensión de la Universidad de Los Andes. Pág. 5.